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Embarazo después de una pérdida

Embarazo después de una pérdida, aquí estamos contigo

 
 
Perder a un bebé no es nada fácil, la verdad es que deseamos que ninguna mamá pase por esa situación, es irreparable, pero aunque suene fuerte, la vida sigue y puedes tener un embarazo después de una pérdida.
 

 

Embarazo después de una pérdida

 
Nunca olvidarás a tu bebé estrella que está brillando en el cielo todas las noches, ahora que estás embarazada, a tu bebé se le llama arcoíris porque viene a iluminar tu vida después del suceso.
 
No tengas miedo, es normal esperar algún tiempo después del primer embarazo, pero estamos seguros de que saldrá bien, solo hay que estar al tanto de tu salud y la del bebé al lado del médico.
 
A veces se elige el mejor momento para embarazarte, pero a veces no, simplemente ocurre.
 
Lo mejor es entender cómo funciona tu cuerpo para saber cuando algo no esté bien o en este caso, el periodo no haya llegado o tengas algunos de los síntomas de los primeros meses. Hay que estar muy atenta a todo.
 

 

Embarazo después de una pérdida: ¡Seguir adelante!

 
 
Ahora que todo va mejor, presientes algo, te hiciste una prueba y sale positiva, hay que dar la noticia a tus seres queridos, en especial al papá, seguro que se pondrá muy contento.
 
Sabe por todo lo duro que has pasado y seguro comprende que este embarazo es un rayo de esperanza para ti. ¡Un gran momento!
 
Como ya lo hemos recomendado, lo mejor es ir con el médico una vez que compruebes la noticia, es necesario llevar acabo algunos cuidados para el bebé y para ti, lo ideal es que te hagan una ecografía que determine el crecimiento del bebé.
 
Así periódicamente harán otras para ver su crecimiento o descartar alguna malformación.
 
MomMom, todo saldrá bien, confía en el médico, sigue las indicaciones y consúltalo en cualquier momento donde sientas que algo no va bien.
 
Recuerda que el bebé comenzará a moverse en el segundo trimestre, así que si no lo sientes o no se mueve, de inmediato con el ginecólogo. A veces es bueno ser quisquillosa y estar al pendiente de cualquier síntoma o malestar.
 
Todo saldrá muy bien, estamos seguros de que pronto recibirás con ternura y muchas ansias a tu nuevo amorcito.
 

 
¡Disfruta cada día de su crecimiento!

 
 
Fuente(s) de apoyo / Más información:
Biblioteca Nacional de Medicina de los EE. UU.

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